La directora ejecutiva de Anses Fernanda Raverta defendió el nuevo índice de movilidad previsional y se mostró segura de un respaldo opositor en el Congreso: "Se va a poder sancionar porque los diputados y diputadas de la oposición saben que los jubilados necesitan una fórmula y es ahora", respondió a LPO, durante una rueda de prensa en el salón Pochat del organismo.

La nueva fórmula copia la que existió entre 2008 y 2017 y toma en cuenta en partes iguales la variación de la recaudación y de la movilidad salarial medida por el Ministerio de Trabajo (Ripte), se ajusta semestralmente y no contempla en forma directa la inflación como pide Cambiemos y reclamaba un sector del Gobierno, al menos para los haberes más bajos.

Reemplazará la creada por Mauricio Macri, que combinaba en un 70% la suba de precios y en un 30% la variación de haberes. Alberto Fernández la suspendió a poco de asumir porque la consideraba incumplible con un récord de inflación de 55% y el deterioro salarial de 2019. 

Guzmán se impuso y la nueva fórmula de movilidad jubilatoria no ajustará por inflación 

El nuevo índice surgió de un dictamen de la bicameral mixta de movilidad integrada por legisladores y funcionarios del Ministerio de Economía y el de Trabajo y no fue suscripto por Cambiemos, cuyos legisladores siguen decididos a pedir un piso de movilidad basado en la inflación. 

Raverta confirmó que esta semana a más tardar el presidente enviará el proyecto al Congreso para su pronto tratamiento. Este martes, Sergio Massa dijo que llegaría primero al Senado, donde el frente de Todos tiene mayoría propia, pero en esa Cámara no hay confirmación de que así sea. 

De todos modos, el presidente de Diputados respaldó la nueva fórmula y recordó que como jefe de Gabinete participó de su creación en 2008, cuando ya tenía 5 años de experiencia como jefe de Anses. "Se terminó de hacer en un bar de la esquina de mi casa", rememoró.

Si cae todo, es porque a Argentina le está yendo mal y nuestra responsabilidad es que no todo caiga. Esta fórmula está atada a un modelo económico que tiene como objetivo el crecimiento. Si eso no ocurre, estamos fracasando en política económica. 

Pero en esa Cámara el oficialismo necesita respaldo de un puñado de opositores para llegar a la mayoría y sin la ayuda de Cambiemos deberá apelar al interbloque federal, un mix integrado por socialistas santafesinos y referentes de Roberto Lavagna y el gobernador de Córdoba Juan Schiaretti, que acompañan al gobierno en algunas ocasiones pero no funcionan como aliados fijos. 

No hay mucho tiempo para negociar: a fin de año vence la segunda suspensión de la fórmula de Macri y si no hay nueva ley de movilidad sancionada para ese entonces el presidente deberá aplicarla o volver a anularla y seguir con las subas trimestrales por decreto. 

Ante una consulta de LPO, Raverta confió en no llegar a esa situación. "Entiendo que los diputados y diputadas de la oposición no tengan una fórmula mejor. Por eso no la proponen. Pero de ahí a impedir que  haya una para que actualice los haberes de los jubilados y los beneficiarios, de la AUH y las asignaciones familiares, sería una contradicción muy grande", sostuvo.

Sergio Massa. 

LPO/ Juan Carlos Casas.

El diputado radical Alejandro Cacace, que integró la bicameral, ratificó que no respaldarán el nuevo índice y pedirán que vuelva la anterior. "Hay una fórmula que está y ellos están reemplazando. Nosotros no vamos a participar del saqueo de remover la inflación. Si están tan seguros que le van a ganar, que la pongan de piso y la votamos", desafió.

Raverta y su equipo explicaron durante casi una hora de intercambio con la prensa que la suba de precios al consumidor está implícita en un 90% del nuevo índice porque es determinante en la variación de la recaudación y de los salarios. 

"En los 9 años que estuvo esta fórmula hubo aumentos por encima de la inflación en 7. Y en los que se perdió, se recuperó en el siguiente. En 2018, el primer año que se ajustó por precios al consumidor, los jubilados perdieron un 18% de poder adquisitivo", explicó el funcionario Alejandro Calabria. 

Recordó que el tope de aumentos anuales de hasta 1.03 de los recursos totales que se propone también estuvo vigente entre 2009 y 2017 y no fue un obstáculo para la suba de haberes. Otro aspecto del proyecto será un principio de "legislación contante", para que una eventual reforma tributaria no altere los cálculos. Además, destacaron que el presidente siempre puede reforzar las jubilaciones mínimas por decreto, como hizo durante este año.  

La directora de Anses exhibió filminas para demostrar que cuando se aplicó la fórmula que buscan restablecer hubo años con hasta el 25% de aumento en la capacidad de compra de los jubilados. "Nosotros pretendemos siempre que le ganen a la inflación, no que le empaten, porque entonces lo que estamos haciendo es cumplir el objetivo de mejorar la calidad de vida jubilados y beneficiarios de la AUH".

Sostuvo que con los parámetros del presupuesto de 2021 los jubilados ganarían con esta fórmula porque se estima un crecimiento de 5.5% que permitirá mejoras salariales y una inflación de 29%, subestimada para muchos analistas. "Si es más, la recaudación y la actualización salarial también será mayor", remarcaron los funcionarios y hasta se esperanzaron con una suba previsional 3 o 4 puntos por encima de escalada de precios.  

"Si cae todo, es porque a Argentina le está yendo mal y nuestra responsabilidad es que no todo caiga. Esta fórmula está atada a un modelo económico que tiene como objetivo el crecimiento. Si eso no ocurre, estamos fracasando en política económica", simplificó Raverta.

Había comenzado su exposición con filminas destacando otras medidas para mejorar los ingresos de los jubilados, como subsidios a medicamentos, a tarifas de servicios públicos o refinanciación de los créditos. También confió en reducir la litigiosidad. "Tenemos 73 mil expedientes, con demandas por 1 millón 300 mil pesos de promedio", informó.

El último fallo desfavorable fue de la Cámara Federal de Salta, rechazó los aumentos por decreto e ideó un índice con la inflación y el índice de actualización de los alquileres, que combina inflación y salarios en partes iguales. El Gobierno la apeló. Y ahora busca sancionar su fórmula propia.